Lo que yo creo + Mi viaje con los hippies

"Lo que yo creo" era el título de un libro que escribió un filósofo.

Pero también es el principio de una frase que podrías usar para escribir tú un cuaderno, o al menos varias páginas.

"Lo que yo creo es que ...", y completas la frase una vez, y dos, y cincuenta y cien.

Aparentemente, llega uno a sorprenderse, sobre todo tras las primeras 20 frases o así, y no sé si intentarlo.

Si lo hago, es fácil que no te lo cuente, porque no sé si estás preparado para tanta brutalidad.

...

En cualquier caso, me recuerda a un experimento que hice cuando me junté con unos hippies. Hicimos un experimento de visualización creativa (personalmente sin usar ninguna sustancia externa, que nunca he tenido ni ganas de usar), consistente en imaginar que te ibas en un cohete espacial.

El viaje, relajante y tal, duraba un par de minutos para tí, pero al volver, por aquello de la contracción del tiempo, volvías a un planeta Tierra en el que habían pasado 50 años.

Cuando ibas acercándote al suelo, te ibas dando cuenta de que el mundo era ahora "perfecto". Como lo de "perfecto" tiene un puntito de subjetividad, tenías que describírtelo a tí mismo y atesorarlo, porque era tu sueño y tal.

Si quieres, haz el ejercicio ahora y así no te contamino con mis resultados.

¿Ya?

Bueno. El caso es que, del mío, recuerdo tres cosas: los centros de trabajo estaban parcialmente derruidos, no había coches sino alguna bicicleta con motor eléctrico, y me pareció que era sábado pero cuando pregunté me dijeron que en realidad era miércoles.

Así que, está claro, lo que quiero en el fondo es que nos ocupemos en lo que nos dé la gana, y podamos caminar por donde nos dé la gana.

Estamos lejos de eso, según se ve.

La cuestión entonces es la siguiente. ¿Puede ocurrir que en realidad todos queramos cosas muy distintas de las que tenemos? ¿Qué pasa si, aunque sólo sea a tiempo parcial, nos preguntamos y nos respondemos este tipo de cosas?

No lo sé.

Pero claro, como el papel electrónico lo aguanta todo, pues ahí lo dejo, que tengo que ir a hacer no sé qué cosas.